30 septiembre, 2007

Candamo: Medio Ambiente o Desarrollo

El recorte del Parque Nacional Bahuana Sonene para establecer un nuevo lote de explotación de hidrocarburos ha generado alarma en los medioambientalistas del mundo. A simple vista la noticia es impactante: un cuarto del territorio perteneciente a Candamo se entregará a privados para explotar un yacimiento gasífero. Los daños que se temen serían irreparables. La zona encierra ecosistemeas únicos en el mundo que se perderían por acción del hombre y su insaciable búsqueda de energía y comercio.

El asunto plantea una cuestión más de fondo. ¿Es el desarrollo compatible con la protección del medioambiente? ¿o ambas son palabras antípodas, irreconciliables?

Los beneficios de obtener el gas de Candamo son indudables. La necesidad que tenemos los peruanos de usufructuar ese recurso también.

Pero, ¿servirán las ganacias del gas de Candamo para desarrollar Madre de Dios, Puno, el sur peruano, o se está pensando en entregar el recurso a transnacionales que lo comprimirán en la planta reenvasadora de gas de Pisco para finalmente llevarlo a mercados del exterior?

La dicotomía de protección del medio ambiente o desarrollo es algo que los legisladores deberán resolver en las próximas semanas cuando resuelvan el proyecto de ley enviado por el Ejecutivo.

El gas es el recurso energético del siglo XXI como lo fue el carbón en el Siglo XIX y el petróleo en el siglo XX. A diferencia de sus predecesores es limpio; es decir, no contamina el medio ambiente.

El gas de Camisea tiene reservas probadas de 13 trillones de pies cúbicos (TCF en inglés); Brasil 8 TCF, Argentina 25TCF, Bolivia 52 TCF y Venezuela 146TCF.

Todos los yacimientos ubicados en Sudamérica (con excepción de Argentina) están ubicados en lo que se conoce como la Franja Subandina, porción de tierra entre la base oriental de la Cordillera de los Andes y la selva. Allí están Mipaya, Pagoreni, Camisea, Candamo, Aguaytía y otros.

En 1990 la Mobil descubrió en la Reserva de Candamo reservas de gas por unos 3 TCF, cantidad similar a la de Pagoreni. Diez años después, el año 2000, el gobierno creó El Parque Nacional Bahuaja Sonene, declarado uno de los siete santuarios naturales más emblemáticos del planeta, el 2002, por la National Geographic Society.

Bahuaja Sonene tiene una extensión de 1 millón 92 mil 142 hectáreas. El proyecto enviado por El Ejecutivo propone recortar 209 mil hectáreas, una cuarta parte de lo que corresponde a Candamo.

Según el Instituto Nacional de Reservas Nacionales (INRENA), cuyo director ya fue removido por oponerse al recorte, esta zona protegida “tiene ecosistemas únicos en el mundo: praderas inundables tropicales (las Pampas del Heath), donde viven el lobo del crin y el ciervo de los pantanos; bosques nublados por debajo de los 1,000 metros de altitud (los cerros del Távara) y el valle escondido del río Candamo”.

Una maravilla planetaria por fuera que esconde una riqueza también planetaria por dentro. En El Hablador –considerada en términos literarios una de las novelas menores de Mario Vargas Llosa, pero valiosa en términos antropológicos- se plantea esta paradoja que encierra conservación pura de la naturaleza y derecho al desarrollo.

Hace poco vimos una fotografía de no contactados en otro punto de la selva peruana, similar a la de los machiguengas vargallosianos. ¿Es legítimo que estas poblaciones mantengan sus condiciones de vida pre-civilizadas? ¿hasta cuándo? ¿no están privando a sus hijos de los beneficios de la vida en civilización? Desde el punto de vista de los derechos humanos, ¿no es válido acaso incorporarlos al mundo moderno?

Y si este pensamiento lo llevamos al gas de Candamo ¿podemos explotar racionalmente este recurso y al mismo tiempo preservar para la humanidad futura el recurso renovable, inagotable, de la vida natural en equilibrio del Candamo? ¿Podemos hacer que el gas de esta zona beneficie también a sus propios pobladores? ¿O simplemente se lo entregaremos a dedo a una transnacional que ya conversó con el poder político? ¿Es posible conciliar los términos medio ambiente con desarrollo y política con honestidad?



27 septiembre, 2007

Historia del capitán Valdivia

Soy el capitán Valdivia y sirvo en la Policía Nacional del Perú. Pertenezco a la División de Vehículos Robados. Mi sede queda en Barrios Altos, pero ahora estoy aquí en la otra punta de la ciudad, con mi unidad policial parada en la puerta de un McDonald’s. No puedo moverme de aquí, sino mi jefe me castiga, como la semana pasada que una señora me pidió ayudarla a mover su vehículo cuatro cuadras más abajo y mi jefe me impuso seis días de rigor por abandonar mi puesto.

Mi especialidad es investigar el robo de vehículos; también tengo preparación para intervenir en operativos de asalto, pero nada de eso puedo hacer ahora. Por lo menos no en estos momentos. Mis órdenes son permanecer aquí con mi carro policial estacionado en la puerta del McDonald’s.

Si veo un asalto o algún peligro, tengo que hacerme el loco. Mi jefe ronca fuerte. Y acostumbra a dar vueltas por los puntos en que ha distribuido los vehículos. En lugar de patrullar la ciudad, los carros cuidan establecimientos privados: bancos, agencias de transporte, restaurantes, negocios en general donde haya flujo de público y se mueva billete. A mi me dijo hace dos meses, te vas al punto acordado y te estacionas en el parqueo que hay en el McDonald’s. Allí te quedas compadre y me mantienes informado si hay algún percance.

Mi compañero y yo cumplimos. Venimos aquí y nos quedamos de 10 de la mañana hasta las 3 de la tarde. A esa hora nos vamos a Barrios Altos a pasar rancho. El McDonald’s no nos da nada. Sólo nos presta el baño. Pase jefe, nos dice el chico que barre.

Lo que pasa es que mi jefe ya arregló con el dueño del McDonald’s. No sé cuánto le cobrará, pero nada de eso llega a nosotros. El jefe ronca como la puta madre cuando se meten con sus puntos. Maneja como veinte vehículos. En un solo turno. Y otros veinte en el otro turno. El mismo ronda por los cada uno de los establecimientos para ver si los carros que ha dejado se han movido.

Yo ingresé con vocación de servir, pero una vez que salí de la escuela, cuando estuve en la calle, me di cuenta que no se puede. Todos te joden. Te piden que hagas una cosa u otra. Al final todo es plata compadre. Mira, ahora tú me estás pidiendo un servicio, ¿no?, que te auxilie porque tu vehículo se ha quedado botado, ¿no?, no puedo. No puedo cumplir con mi función de servir. Salvo, claro que le avise a mi jefe, que le diga que hay un servicio para jalar un carro y que hay una propina por eso. Algo tengo que llevarle, ¿me entiendes?

Espera, voy a avisarle. ¿Aló, jefe? ¿cómo? Ya jefe... ¡ya compadre! ¿hasta dónde me dices que hay que llevar el carro? Va a venir mi jefe personalmente. Dice que está cerca. Yo le he dicho que eres un primo lejano, que te voy a servir, tú sabes, los teléfonos no son seguros y nunca se sabe. ¿Tienes soga?, ¿dónde dices que está tu carro? Allí viene mi jefe. Jefe, le presento a mi primo. Tiene un carro aquí cerca; lo voy a remolcar al taller. Un toque jefe. Gracias jefe. Ese mi jefe. Ya regreso jefe.

Así es mi jefe. Me da permiso para hacer un cachuelito; mientras él se queda cuidando el McDonald’s hasta que regrese. Si no, no le pagan.


--------------------

P.d. Los nombres y los lugares de esta historia (excepto el McDonnald`s) han sido cambiados para proteger al oficial de la PNP con el que me encontré de causalidad un día en que mi carro se malogró y, como cualquier mortal, acudí a un hombre de uniforme para explicarle mi situación y lograr que me ayudara. Me ayudó sobremanera.



26 septiembre, 2007

El Apra contrataca

Es falso que el Presidente García tenga “cosas más importantes que hacer que perseguir personas”, como le dijo recientemente a Augusto Alvarez Rodrich cuando el director de Perú 21 le preguntó sobre las acusaciones que el procurador Gino Ríos ha fabricado contra Alejandro Toledo. En menos de 24 horas, apenas Toledo regresó a Estados Unidos, la Fiscalía decidió denunciar a Eliane Karp por supuesta malversación agravada de un cheque de 10 mil dólares que no llegó a las víctimas del terremoto de junio del 2001.

La denuncia fue entregada primero al procurador Ríos y éste, diligentemente, la faxeó a todos los medios de comunicación. La parte agraviada, por supuesto, no fue comunicada, como corresponde en un debido proceso.

Esto no sería grave si no fuera porque se está configurando un caso judicial de un hecho que ha sido tergiversado en todos sus ángulos, tal como aparece hoy en el diario Expreso.

Según este diario, el dinero que se recolectó en un bingo organizado por damas ecuatorianas y peruanas en Quito se depositó en la cuenta privada de Eliane Karp en el Citibank; se quedó allí durante seis meses y luego “supuestamente” sirvió para construir una escuela en Cusco. Lo único cierto en todo esto es lo del bingo.

Los hechos son sencillos de explicar. En junio del 2001 ocurrió un terremoto en el sur que dejó miles de damnificados, principalmente en Moquegua y Tacna. Toledo visitó la zona del desastre siendo presidente electo y cuando asumió el poder creó un organismo encargado de la reconstrucción de los pueblos afectados, Ordesur.

Las damas de Quito realizaron un bingo benéfico y llegaron a obtener 10 mil dólares en donaciones. En noviembre del 2001 Toledo realizó una visita oficial a Ecuador y en ese contexto las damas quiteñas realizaron una reunión y le entregaron el cheque a Eliane Karp para que lo destine a los más pobres. ¿Por qué cambiaron de destinatario? Porque habían pasado cinco meses del sismo, el gobierno ya había creado Ordesur y la ayuda se estaba canalizando por esta vía mediante presupuesto público.

El cheque entregado fue endosado por la señora Eliane Karp para que el Banco Wiese se encargue de la cobranza y se abone a la cuenta de ahorros de la Fundación Pacha. El dinero jamás fue a la cuenta personal de Eliane Karp, ni fue cobrado por ella, ni se demoró seis meses en llegar a Pacha como dice la información.

El dinero se transfirió íntegramente a Foncodes, y sirvió para construir un centro artesanal – educativo en la comunidad de Quero, localidad de Munay Tika Provincia de Paucartambo, Cuzco, zona considerada de extrema pobreza ubicada a 4,200.m.sn.m.

El cambio de beneficiarios del dinero recaudado en el bingo se realizó con el consentimiento expreso de los organizadores, en ceremonia pública. Los 10 mil dólares obtenidos en ese evento no son fondos públicos porque provienen de un acto privado -el bingo- en el cual participa libremente cualquiera que compre un boleto. No puede, pues, existir la figura de malversación de fondos con dinero privado que proviene de personas privadas.

Pero la fiscal Berrú, movida por el procurador Ríos, hombre del Presidente García, piensa que no. Que el dinero recolectado por las damas es dinero público y debió ir a los damnificados, aún cuando los organizadores libremente cambiaron su decisión. Un razonamiento forzadísimo por dónde se lo mire, que no tiene explicación, sino en el campo político. Es un acto persecutorio. O distractivo. O ambos.



25 septiembre, 2007

¿Vuelve el Pan Popular?


Hay dos horrores que el primer Gobierno de Alan grabó en el inconsciente colectivo: el Pan Popular y la Leche Enci. Quienes vivimos esa época recordamos aún ese amasijo oscuro, horneado de afrecho y cáscara de trigo, muy bueno para la digestión por la fibra que contenía, pero que revelaba el fracaso de la política económica intervencionista. Su complemento ideal del desayuno 85-90, era la leche Enci, harinoso lácteo con más propiedades laxantes que nutritivas.

La pesadilla de esos años volvió a repetirse ayer cuando el premier Del Castillo convocó a su despacho a panificadores y especialistas para proponerles “encontrar la fórmula más adecuada para elaborar un pan de bajo costo y rico en proteínas”.

La idea era abaratar los costos del pan francés tradicional que amenaza con volver a subir de precio debido al aumento exponencial del precio del trigo en el mundo.

En los últimos meses la tonelada de trigo ha aumentado de 200 dólares a 350 dólares, obligando al gobierno a reducir a cero los aranceles de importación.

El Perú produce unas 300 toneladas de trigo al año e importa poco más de cuatro veces esa cantidad: 1 millón 400 mil toneladas.

Los desórdenes climáticos y la arremetida del maíz para biocombustible explican el decaimiento de la producción mundial del trigo.

El impacto que estos factores agroeconómicos exógenos tienen en países dependientes del cereal como el nuestro, es terrible.

Aquí el gobierno redujo los aranceles a cero, se aumento del sueldo mínimo en 50 soles (30 soles a partir de octubre y 20 soles desde enero), se anunciaron 40 mil empleos temporales para los sectores de escasos recursos, y se inició una campaña para promover el consumo de la papa en lugar del pan.

Todas estas medidas han resultado insuficientes. El pan ha pasado de 0.10 céntimos la unidad a 0.15 y amenaza con seguir subiendo.

De ahí que el Premier Del Castillo convocara ayer a su despacho a panificadores y representantes de productores, agricultores y molineros y les propusiera pensar en fórmulas alternativas.

La idea era preparar un pan más barato y con menos proporción de harina importada.

El que aparentemente ganó la prueba de economía y sabor aceptable fue la “chapla”, humilde pan cholo elaborado con harina local, achatado y chicloso de gran popularidad en la sierra peruana.

Todo iba bien hasta que a alguien se le ocurrió rebautizar al “chapla” como “pan popular”. Los asistentes se miraron y enmudecieron al recordar los viejos tiempos.



24 septiembre, 2007

Alianza con sangre en el ojo

La alianza aprofujoimorista ha ingresado en una fase de replanteo. Los primeros escarceos han sido por condiciones de carcelería y salud, pero si los fujimoristas quieren la impunidad de Alberto Fujimori tendrán que elevar la cota de las pugnas como volver a poner en el asador el oscuro accionar del doctor García en El Frontón. Será un toma y daca fuerte, con pasajes de furia descontrolada, como la que hemos visto contra el monumento El ojo que llora; ensangrentado por el odio y la ira fujimorista.

En esta guerra de posiciones habrá que estar atento más a las acciones que a las palabras. Los fujimoristas necesitan que el Apra les muestre en los hechos su disposición a colaborar. A cambio, pondrán en la balanza sus votos en el Congreso.

Por ahora son sólo movimientos preparatorios y rugido de motores. Pero no un enfrentamiento que amenace la alianza que ha mantenido García en su segundo mandato. Las declaraciones de Raffo, Souza y Keiko y las respuestas de García, Mulder y otros son las primeras clarinadas de una situación que, en efecto, podría devenir en algo mayor: un replanteo en el tablero político con un gobierno presionado por el fujimorismo y, finalmente, prescindiendo de él.

Para que eso ocurra el gobierno tendría que endurecer las condiciones carcelarias del extraditado, seguir aumentando el tono de las declaraciones y dejar a Fujimori a merced del Pode Judicial. En ese rumbo de colisión, el fujimorismo, por su lado, tendría que seguir perdiendo los papeles hasta el punto, por ejemplo, de censurar al ministro Luis Alva Castro la próxima semana.

El fujimorismo tiene aún varias cartas por jugar. Una es la de utilizar la posición privilegiada del primer vicepresidente Luis Giampietri. Sin embargo, usar como bandera de lucha el caso de El Frontón no es la mejor fórmula para arrinconar a García y contar al mismo tiempo con el apoyo de Giampietri. En este tema el presidente y su vicepresidente son socios de sangre y ni los lloriqueos de Keiko ni el futuro de Fujimori puede cambiar esta situación.

La otra carta es abrir la caja negra de los vídeos, si esta existe.

Si hay un momento para usar los famosos vídeos grabados por Montesinos y el propio Fujimori con políticos, jueces, periodistas y empresarios es éste. O mejor dicho, el momento en que el Poder Judicial empiece realmente a apretar. En el juicio al allanamiento a la casa de Vladimiro Montesinos se señala que Fujimori se llevó varias maletas que según la ex esposa del ex jefe del SIN, Trinidad Becerra, contenían videos clasificados.

Todavía queda mucho que negociar en esta trama. Por el momento, el dolor y la furia, junto a la prepotencia y el cinismo, domina a los fujimoristas. García ha pretendido mantenerse distante, exagerando su posición de estadista, pero es un hecho que alimentó y engrió a Keiko y a su grupo político y que ahora la joven se siente no sólo herida, sino traicionada. En ese sentido las negociaciones serán con sangre en el ojo.


21 septiembre, 2007

Fujimori en Perú: momento de presiones

“Es el peor escenario para el gobierno y para los fujimoristas”, decíamos ayer al analizar la extradición de Alberto Fujimori al Perú. La llegada del procesado nos compromete a vigilar, evaluar y denunciar la triangulación de presiones que, a partir de ahora, se jugará en el Poder Judicial, el Gobierno, el Congreso, los medios y las calles.

Fujimori no ha sido, ni por asomo, condenado aún. La lucha por hacer que pague sus culpas, dentro de un juicio justo con las garantías necesarias de un debido proceso, acorde con una democracia que se respete de tal, tendrá que ganarse palmo a palmo. En todos los terrenos.

Los fujimoristas ya ejecutaron su primer movimiento. No aceptarán que su líder sea vejado, ni maltratado mediáticamente, ni menos que se le encierre en una prisión de máxima seguridad, acorde con sus antecedentes de fuga. Eso ha dicho Kekiko Fujimori. Es la táctica. Respeto para el Chino.

Pero la estrategia la ha expuesto mejor Martha Chávez. Ella ha dicho que así como Alan García fue absuelto por el Poder Judicial por delitos muchos más graves como “los penales”, de la misma manera Alberto Fujimori debiera ser absuelto de acusaciones de menor cuantía (en número de muertos, se entiende). Absolución de cargos.

Los fujimoristas presionarán a García y al propio Poder Judicial apelando a todos sus recursos. No se puede descartar incluso el chantaje de nuevos videos en manos de Fujimori o del propio Vladimiro Montesinos. Si en verdad existen estos videos comprometedores de personajes importantes de la esfera política-judicial, que según todos los indicios, Fujimori se llevó en varias maletas, este es el momento de ser usados.

Los votos fujimoristas en el Congreso también son parte del avituallamiento que tiene Alberto Fujimori para defenderse. Nunca como hoy estos votos valen tanto, si es que el gobierno quiere mantener la holgura en las votaciones que hasta ahora ha tenido. Impunidad por gobernabilidad sería el trueque.

En cuanto a las calles, habrá que esperar para sopesar la capacidad del fujimorismo para sostener un movimiento coordinado y suficientemente importante que amenace la tranquilidad y orden públicos. Las primeras reacciones han sido un ingreso kamikase al Poder Judicial y un pequeño grupo de simpatizantes al aeropuerto. Nada espectacular.

¿Qué hará el gobiermo? ¿transar? ¿apoyar al Chino en el Poder Judicial? ¿Comprometer a terceros? ¿Toledo por ejemplo? ¿la política del todos son corruptos? ¿ponerse de costado? ¿dejar que el Poder Judicial cumpla libremente su tarea?

La lucha será larga y en diversos frentes. Por más que Fujimori se esfuerce en demostrar que lo tenía todo calculado es evidente que la línea principal de su estratagema –su candidatura presidencial- ha sido derrotada. Quizás por eso declaró ayer a un medio extranjero que “un Fujimori será candidato el 2011”. No pensaba en él. Ya no.



19 septiembre, 2007

Los escenarios de Fujimori

A pocas horas que los magistrados supremos de Chile firmen la resolución que afirma o niega la extradición de Alberto Fujimori, cuatro son los escenarios posibles. Los actores principales son el propio Fujimori, el Gobierno del presidente García y el gobierno de la presidenta Bachellet. El fallo de la Corte Suprema chilena cambiará, sin duda, el eje de la política interna por un periodo largo, muy largo, que podría llevarnos, incluso, a contaminar la agenda interna del país y distraernos de la tarea principal que tenemos como opositores democráticos que es la de vigilar el desenvolvimiento del gobierno. Veamos:

1. Fujimori no viene y es expulsado al Japón.

Es el escenario que más conviene a al gobierno y a los fujimoristas, aunque tiene el inconveniente de afectar a la presidenta Bachellet. Un Fujimori embarcado rumbo al Japón fortalecería la alianza aprofujimorista interna, pero tiene el inconveniente de afectar el gobierno de la Concertación, vapuleado por las encuestas y por el débil manejo de Bachellet en el tema del Trasantiago, hasta hoy no resuelto. García respiraría aliviado. Los fujimoristas venderían el provecho que podría obtener el país de las relaciones con el Japón, pero Chile perdería el asiento en el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, al que aspira.

2. Fujimori no viene, pero es juzgado en Chile

Sería un insulto para los peruanos que un gobierno extranjero someta a su justicia a un ex presidente. Por más dictador que éste haya sido. El Perú tiene el derecho de asegurar a sus ciudadanos –sin que importe la gravedad de sus delitos- un juicio justo. Es la segunda opción que escogerían los fujimoristas y también los apristas. El gobierno chileno, sin embargo, difícilmente quisiera tener a alguien como Fujimori ventilando un proceso judicial largo que se mezcle con su agenda interna.

3. Fujimori viene, pero por delitos menores

Es el escenario que manejan los fujimoristas esperanzados. Tiene la ventaja que cierra las posibilidades de procesar a Fujimori por los crímenes de La Cantuta y Barrios Altos, dejando sólo casos menores cuya pena de cárcel no excedería los tres años, lo que lo dejaría expedito para tentar una candidatura el 2011. Los apristas ofrecerían a cambio el control que tienen en el Poder Judicial, lo que aseguraría la gobernabilidad en el Congreso. Chile quedaría lesionado en su camino al cupo de Derechos Humanos en la ONU, pero es una situación que podría manejar.

4. Fujimori viene por delitos de lesa humanidad

Es el peor escenario para el gobierno y para los fujimoristas. Automáticamente Fujimori quedaría eliminado de cualquier opción el 2011. Su juicio largo en el Perú afectaría la alianza con el partido de Gobierno. El impacto de un Fujimori encarcelado y sometido a juicio por crímenes terminaría por desalentar a los fujimoristas. Alan no resistiría la presión de los fujimoristas por impunidad. Un escandaloso arreglo del Poder Judicial para favorecer a Fujimori terminaría desgastando a García. El único que ganaría sería el gobierno chileno, pues aseguraría el cupo internacional en derechos humanos que reclama La Concertación y que Bachellet necesita a gritos para salir de la hondonada en que se encuentra.



18 septiembre, 2007

Majaz y los intereses de Chile

Entre los fantasmas que el presidente García ve en el conflicto minero de Majaz, hay uno que conviene que aclare: Chile. Según denunció el Jefe del Estado “si alguna ONG se opone al desarrollo minero en el país es porque existen intereses de fuera que impulsan el estancamiento del Perú en dicho sector”.

- ¿A quién le conviene que el Perú no produzca 5 millones de toneladas de cobre, sino que nos quedemos con uno?- preguntó García.

- A Chile-, respondió de inmediato un periodista.

- Usted lo ha dicho-, retrucó el presidente. Y allí quedo el asunto.

No es la primera vez que se oyen argumentaciones como esta señalando un complot internacional que impide ejecutar obras de desarrollo importante en el Perú o en Bolivia.

Es conocido que muchas de las protestas mineras bolivianas reciben apoyo indirecto de empresas mineras chilenas. Incluso hay quienes afirman que es política del gobierno chileno trabajar con las comunidades aymaras buscando su unidad política como una forma de desmembrar el territorio occidental boliviano y el sureste peruano.

Pero escuchar a un Jefe del Estado esbozar la tesis de complot de un país fronterizo en territorio nacional es algo que no debiera pasar desapercibido. Excepto, claro, que sólo se trate de un juego distractivo del doctor García para lograr unidad en la disputa por introducir la actividad minera en las provincias de Ayabaca, Pacaipampa y Carmen de la Frontera en Piura.

La minería en Chile es la base del su despegue económico. Si bien en empleo apenas absorve el 1% de la demanda laboral sus aportes al fisco son cuantiosos. Chile representa el 35% de la producción mundial de cobre, liderando la posición de países exportadores de este mineral. Esto siginificó el año pasado exportaciones mineras por más de 38 mil millones de dólares.

El 2006, la actividad minera en Chile representó el 65% del total de las exportaciones de ese país, coincidiendo con un ciclo positivo de precios altos y aumento de la producción. Se calcula que la inversión minera extranjera en Chile en el perido 1974-2006 es de 21 mil millones de dólares; un tercio del total de inversiones extranjeras en el país.

No está demás destacar que las principales zonas chilenas ricas en minerales son los antiguos territorios de Perú y Bolivia perdidos en la Guerra del Pacífico. En Antofagasta, por ejemplo, el pasado 31 de agosto de este año, después de 92 años, se cerró el complejo minero de Chuquicamata.

Esta mina se abrió 30 años después de culminada la guerra trinacional. Y durante todo este tiempo ha rendido ingentes ingresos al país del sur. Un informe del diario El Mercurio señala que "Según la encuesta CASEN, Antofagasta redujo la pobreza desde 14,3% en 1987 a 3,2% en 2003 y tiene también el menor porcentaje de analfabetismo”

Está claro que Chile no sería hoy lo que es sin la minería. De ahí que esta actividad sea conocida en el país del sur como "El sueldo de Chile" o "la viga maestra de la economía". Lo que no tiene mucho sentido es que en el juego internacional por alcanzar el desarrollo de un país, se busque bloquear el desarrollo del vecino. ¿O sí? ¿Qué más sabe el presidente sobre este tema?



14 septiembre, 2007

TLC: empezamos de nuevo

Carlos Gutiérrez, secretario de Comercio de los Estados Unidos, es el único miembro del gabinete Bush que habla español. Y habla claro. Por eso no sorprendieron sus declaraciones cuando en sonoro castellano dijo que "ojalá la aprobación (del TLC) sea este año y si no el año que viene". No se trataba de un mal uso del idioma. Lo que Gutiérrez revelaba era un mal juego de nuestra política comercial.

En un abrir y cerrar de ojos hemos pasado de casi tener un TLC firmado en el segundo semestre del 2006 a conformarnos con la prórroga del ATPDEA en febrero del 2008 para esperar un Tratado de Libre Comercio –en el mejor de los casos- en enero del 2009.

Pero, para que eso ocurra, tenemos que empezar de nuevo.

El próximo año la campaña electoral dominará la agenda norteamericana. Todo indica que el próximo presidente de los Estados Unidos será un demócrata, mucho más preocupado que los republicanos en el impacto que pueda tener un TLC en sus propios trabajadores (léase electores).

Las trabas han sido la desordenada y mayoritaria informalidad laboral que existe en el Perú. Pero también la dejadez y medianía política de este gobierno que prefirió perder el tiempo en distractivas políticas mediáticas los primeros meses de mandato en lugar de acelerar el cierre de las negociaciones.

Seamos claros: el presidente García se opuso al TLC en campaña y no lo entendió sino tres meses después de asumir el gobierno, cuando ya era muy tarde.

David Lemor conoce los problemas que originaron las palabras del candidato García en Washington cuando dijo que había que renegociar el tratado, mientras los empresarios peruanos y el propio Presidente Toledo y sus ministros buscaban uno a uno los votos del congreso norteamericano.

El ahora negociador del TLC y presidente ejecutivo de Pro Inversión, ha tenido que ratificar las expresiones del secretario de comercio norteamericano: "Normalmente los TLC entran en vigencia el primer día de un año calendario, usualmente ha sucedido así. En el peor de los casos podríamos esperar que entre en vigencia el primero de enero del 2009, si es que demorara un año más la implementación, pero haremos todo lo que podamos para que se implemente lo más rápido posible".

Según Lemor -citado por la Agencia Andina- el Perú necesita contar con un sistema "más predecible y estable" en los temas tributario y aduanero, así como reducir los tiempos de despacho de mercancías y de emisión de licencias. "Tenemos que hacer estos cambios. Ello requiere en algunos casos modificaciones normativas o legislativas, y en otros el fortalecimiento de instituciones de control".

No sólo eso. En vista del futuro cambio de administración en los Estados Unidos, necesitamos más operadores políticos y comerciales que en perfecto spanglish le digan a los gringos: firmemos el TLC o simplemente don´t help me, compadre.



13 septiembre, 2007

Majaz y los conflictos mineros

Si vemos el mapa de conflictos mineros preparado por la Defensoría del Pueblo, el Perú empieza a tener sarampión, por los brotes de puntitos rojos que empiezan a multiplicarse. De 76 conflictos activos en el país, 46% (35 casos) son enfrentamientos entre poblaciones y empresas mineras.

No hay duda que las inversiones mineras son hoy en día la principal fuente de recursos del Estado. Pero también el principal foco de tensión de las fuerzas sociales y una gran preocupación para el Gobierno.

Intereses de grupos diversos se manifiestan en la actividad minera y sus alrededores: autoridades elegidas, líderes consuetudinarios, partidos políticos, población, Iglesia, ONGs. Todo ello amalgama un cóctel político social de gran potencia.

Defensoría del Pueblo: 76 conflictos activos en todo el país.

El caso más reciente lo vemos en las provincias del Alto Piura donde la población participará este domingo en una consulta popular para expresar su opinión en torno a la continuidad o no del proyecto minero Majaz.

No hay que perderse mucho en las formalidades legales de la consulta. Se sabe que no es vinculante y que no participarán ni los organismos electorales ni la Defensoría del Pueblo. Pero no se puede impedir el contenido simbólico que tiene el proceso. La gente tiene derecho a opinar sobre lo que pasará en su territorio.

Si se respetaran los mecanismos de diálogo y consulta que reclamaban los pobladores del Alto Piura, no se hubiera llegado a la situación extrema de convocar a un acto electoral que carece de legalidad funcional, pero que es perfectamente válido que se realice. De alguna manera, el Estado y las mineras tienen que escuchar a la población.

Es cierto que las lecciones del domingo no generan derecho de veto a la actividad minera, pero pueden ayudar a la búsqueda de consenso.

Ojalá las partes hubieran leído –y aplicado- antes las recomendaciones de la Defensoría del Pueblo contenidas en un excelente documento presentado hace unos días al Congreso de la República. Las recomendaciones –que aquí resumimos- son para los tres actores principales del conflicto: el Estado, la empresa y la población.

Para el Estado:
- Reformar y fortalecer la institucionalidad ambiental, mediante la creación de una autoridad ambiental independiente de los sectores, con peso y responsabilidad política en los temas de su competencia, con recursos técnicos y presupuestales suficientes y que lidere el proceso de descentralización de la gestión ambiental.

- Mejorar los mecanismos de participación y consulta ciudadana.

- Incrementar la efectividad en el uso del canon y sobrecanon y aplicación de las regalías.

Para las empresas:
- Cumplir escrupulosamente las obligaciones ambientales y derivadas de la normatividad, de los instrumentos ambientales autorregulación.

- Privilegiar el diálogo y la transparencia durante todo el ciclo del proyecto y darle prioridad al cumplimiento de sus compromisos con las comunidades.

Para la población y organizaciones de la sociedad civil:
- Privilegiar el diálogo y la participación responsable y transparente en los
procesos de diálogo formales e informales.

- Modificar y mejorar actitudes y conductas de la población y de los líderes de las organizaciones de la sociedad civil, medios de comunicación, organizaciones no gubernamentales y partidos políticos, evitando el uso de discursos confrontacionales, posiciones maximalistas y el llamado a la violencia.



10 septiembre, 2007

11 - S en Palacio

Tres minutos después del primer ataque a las torres gemelas, CNN empezó a transmitir la noticia. Eran las 8:49 a.m. El presidente George W. Bush estaba fuera de Washington, en un colegio para niños en Texas y su secretario de Estado, Collin Powell, fuera de Estados Unidos, a cientos de kilómetros de distancia, en Perú.

Hacía 30 minutos que Powell estaba en el Salón de Embajadores de Palacio de Gobierno, conversando con el Presidente Alejandro Toledo. Había llegado a las 8 y 15 a.m. en punto. Estaba en el país para participar del nacimiento de la Carta Democrática Interamericana, iniciativa peruana aprobada por la OEA.

El primer ataque a la torre norte, producido a las 8:46 a.m., generó información confusa. Se dijo que una avioneta había chocado accidentalmente contra una de las torres del World Trade Center.

A las 9:02 a.m. impactó el segundo avión en la torre sur. Las imágenes se vieron en directo. Saltamos de nuestros asientos y subimos el volumen al televisor. Fue entonces que se empezó a hablar de un ataque terrorista.

El corazón del imperio había sido atacado.

La sala de prensa -desde dónde seguíamos el encuentro entre Toledo y Powell- se alteró por completo. De inmediato redactamos una nota y se la enviamos al Presidente: “Ataque a Estados Unidos. Dos aviones se estrellan contra el World Trade Center. Se dice que podría ser un ataque terrorista. CNN transmite en vivo”.

El Presidente comunicó a Powell la tragedia. El secretario de Estado dio una orden a uno de sus servidores. El hombre empezó a marcar el teléfono celular. Los edecanes instalaron un televisor en el Salón de Embajadores y pusieron CNN. El secretario de Estado no podía comunicarse. Se fue entonces a otra sala donde días antes se había instalado una línea telefónica especial.

El 11 de setiembre de 2001 murió casi tanta gente como en el ataque a Pearl Harbor en 1941. Fue el mayor ataque terrorista que hubiera sufrido Estados Unidos en toda su historia. Según anota el ex canciller alemán, Joschka Fischer en su libro “El retorno de la historia”, perecieron más del triple del total de norteamericanos que murieron en atentados terroristas ocurridos en los treinta años anteriores.


Powell se dio tiempo para asistir a la asamblea de gobernadores de la OEA, y aprobar la Carta Democrática. La asamblea en pleno guardó un minuto de silencio en homenaje a las víctimas. Al hacer uso de la palabra, en medio de muestras de respaldo y solidaridad de los representantes de América Latina, dijo:

“Una terrible, terrible tragedia ha ocurrido en mi nación, que también les ha ocurrido a todas las naciones de esta región, a todas las naciones del mundo y a todos aquéllos que creen en la democracia.

Nuevamente vemos terrorismo; vemos terroristas, personas que no creen en la democracia, personas que consideran que con la destrucción de edificios, con el asesinato de personas, de alguna manera pueden conseguir un objetivo político. Pueden destrozar edificios, pueden matar gente, tragedia que nos entristecerá; pero nunca les permitiremos matar al espíritu de la democracia. No pueden destruir nuestra sociedad. No pueden destruir nuestra convicción en el proceso democrático”.

Es importante que me quede aquí (en Lima) un poco más, para ser parte del consenso de esta nueva carta democrática. Eso es lo más importante que puedo hacer antes de partir de mi regreso a Washington … ”.

Luego, se despidió de la asamblea y se fue.

Este pasaje lo cuenta Bob Woodward en su libro “Bush va a la guerra”. Pero quienes, circunstancialmente, estuvimos ese día cerca de Powell lo vivimos directamente. Y sentimos de cerca su dolor.



08 septiembre, 2007

Lecciones de la APEC

El Perú pertenece a la Cuenca del Pacífico pero su comercio -mayoritariamente-, es todavía lineal occidental antes que ultramarino oriental; lo mismo que sus inversiones. Si bien el 52% de nuestro comercio internacional es de países miembros de APEC, más de la mitad proviene de los Estados Unidos. Nos falta expandirnos en línea recta al otro lado de la cuenca.

El mayor dinamismo comercial se desarrolla hoy en el Pacífico, como antes -durante más de 500 años- fue en el Atlántico. Tenemos pues un posicionamiento geográfico ventajoso, que no tuvimos en el pasado. Y un mercado de 2,500 millones de personas, la mitad chinos.

Hasta la década del sesenta la mayoría las economías asiáticas estaba por debajo de muchos de los países de América Latina. Por aquel entonces el Perú tenía un ingreso per cápita de 200 dólares y Corea del Sur 82 dólares.

En términos gruesos, las exportaciones peruanas eran de 44 dólares por cada peruano versus 1. 34 dólares por cada coreano. El Perú venía de una época de crecimiento –los dorados y “apachurrantes” años 50 como los llamó Thorndike-, mientras que Corea salía de una guerra civil que dividió en dos el país y la sumió en la miseria.

Treinta años después, las cifras se invirtieron. Para fines de la década de los ochenta el Perú exportaba unos 1,200millones de dólares en tanto que Corea superaba los 80 mil millones de dólares. Hoy el Perú bordea los 23 mil millones de dólares en exportación y Corea del Sur pasa los 253 mil millones de dólares.



Nuestras exportaciones son principalmente materias primas. Somos el primer exportador de plata del mundo, el segundo en oro, el quinto en cobre. Corea del Sur es el quinto exportador mundial de aceite mineral, el octavo en aparatos y material eléctricos, el décimo quinto en máquinas y aparatos mecánicos, el sexto en fundición, hierro y acero, y el noveno en aparatos ópticos, de medida y médicos.

No hay una sola respuesta para explicar el desarrollo de los países. Pero la oreintación de los mercados es una característica importante. Mientra América Latina sigió durante décadas los dictados de Prebisch y la CEPAL, que buscaban desarrollar las economías priviliegiando los mercados “hacia adentro”, dentro del modelo de sustitución de importaciones; los países asiáticos orientaron sus economías hacia mercados del exterior, con una agresiva política de planificación a largo plazo, basado en la aplicación de nuevas tecnologías.

Hay también una cuota de sacrificio en el corto plazo, una mano de obra no sólo más barata, sino mejor preparada, una fuerte inversión en Educación, Salud e Infraestructura y cierta mística en la población para amalgar identidad con competitividad.

Factores externos como la ayuda y presencia norteamericana en la región en medio de la lucha ideológica de guerra fría, ayudaron también a profundizar la brecha que hoy separa a América Latina del bloque de países del sudeste asiático.

Ahora que escuchamos hablar al presidente García de presentar a México, Chile, Perú y Colombia como ejemplos de países comprometidos con un modelo de mercados abiertos –a diferencia de otros que siguen un modelo de economía cerrada-, no cabe, sino, reconocer el tiempo perdido.

Veintidos años atrás el Presidente García salía a enfrentarse al mundo, declaraba unilateralmente el pago del 10% de la deuda externa y llamaba a consumir lo que el Perú producía. Hoy prefiere integrarse al mundo, pagar la deuda por adelantado y abrir mercados. Son las lecciones duras que enseña la vida.



05 septiembre, 2007

APEC y el mito del desarrollo

Antes de partir a la Cumbre APEC en Australia, el presidente Alan García ofreció una conferencia de prensa en la que deslizó dos ideas equivocadas en torno a la minería y el modelo de producción que debemos impulsar: la necesidad de ampliar la producción de recursos mineros para alcanzar el desarrollo, y la existencia de “agitadores comunistas” que atentan contra el Perú.

La negativa a la explotación de Majaz, no es un acto de un grupo de comunistas revoltosos. Es la posición de todo un pueblo que ha vivido durante centenares de años de la agricultura y que siente amenazado su modo de producción ante experiencias catastróficas de mineras que no respetaron el medio ambiente.

Aún cuando el estudio de impacto ambiental no está terminado, la gente desconfía de la convivencia sana y rentable al mismo tiempo de la minería y la agricultura. Hay sí un grupo de radicales que busca ganar a río revuelto, pero no todos se oponen en términos ideológicos. Para muchos pobladores la cosa es más sencilla: no están convencidos que el agua que use la minería sirva luego para regar sus cultivos. O para consumo humano.

El segundo concepto equivocado del presidente es más lamentable. La minería no es el motor del desarrollo. La exportación de productos minerales por sí sola no sacará al Perú del club de países pobres. El ciclo de buenos precios de los minerales es corto en el tiempo histórico, como antes lo fue el ciclo del guano y del salitre. Se da por factores externos y termina igualmente por factores externos.

Los países que han salido del subdesarrollo no lo han hecho gracias a la exportación de productos primarios, sino a la exportación de productos con valor agregado fruto de la innovación y el desarrollo de nuevas tecnologías. Este tema lo ha explicado bien el embajador Oswaldo de Rivero en su libro El Mito del Desarrollo.

Lo que falta –sostiene de Rivero- es más inversión en ciencia y tecnología. Estudiar menos filosofía, sociología, literatura o derecho y dedicar más tiempo a la matemática, la física y la química. Experimentar, investigar. Preferir menos la letra y más el logaritmo.

Se equivoca pues el presidente cuando señala que la minería nos llevará al desarrollo. La minería genera divisas, sí. Entrega recursos al Estado y éstos pueden ser aprovechados. Pero si no invertimos esos recursos en desarrollar líneas de investigación en otras áreas menos vulnerables a los cambios internacionales, difícilmente podremos competir ventajosamente en el mercado mundial e iniciar el despegue económico.

Los casos de los países que visitará el Presidente García en APEC señalan muy bien el camino a seguir. Japón, China, Corea, Singapur, no han tenido a la minería como principal motor de desarrollo. Todos estos países invirtieron fuertemente en educación y apoyaron la investigación científica aplicada a productos de gran poder comercial que rápidamente se introducían al mercado.

Hasta la década del cincuenta el producto bruto peruano era superior a la de muchos países del sudeste asiático. Medio siglo después, ellos son conocidos como “Los Tigres del Asia” y nosotros seguimos ocupando un modesto lugar entre los países no desarrollados. ¿Qué pasó? ¿Qué hicimos mal aquí y qué hicieron bien allá?... El presidente tiene la oportunidad de intercambiar experiencias directas con las principales potencias del mundo. Ojalá le sirva para cambiar su visión errada del mito del desarrollo.

03 septiembre, 2007

Chehade y la mano negra

La advertencia del procurador Omar Chehade en el sentido de que una mano negra, escabrosa, pudiera contaminar la transparencia del acuerdo de la Segunda Sala de la Corte Suprema de Chile que debe pronunciarse sobre la extradición del Alberto Fujimori, activó el nervio central del gobierno, delatándolo, una vez más.

En lugar de respaldar al procurador, las principales autoridades del gobierno –premier, ministra de Justicia y jefe de procuradores- criticaron las declaraciones del defensor del Estado peruano. En tanto que el fujimorismo, a través del congresista Alejandro Aguinaga, lo tildó prácticamente de insano mental.

El efecto de las declaraciones de Chehade ha sido revelador y confirman el nulo interés del gobierno en la extradición de Fujimori. Esta vez, ya no sólo se pone de costado, sino abiertamente en contra, abusando de la estrategia del silencio entendida como una “postura oficial para no politizar el caso”.

En un reciente artículo de Buen Gobierno, la ex parlamentaria Anel Townsend señala que la tal politización no existe, por el contrario, el Art. 118, inciso primero, de la Constitución Política del Perú, obliga al Presidente de la República a “cumplir y hacer cumplir la Constitución y los tratados, leyes y demás disposiciones legales”.

Y el Perú es signatario de tratados internacionales como la Carta de las Naciones Unidas y las convenciones contra la violación de los derechos humanos. El presidente de la República, invocando esta prerrogativa, tiene el deber de pronunciarse a favor de los intereses del Estado, violados por Alberto Fujimori.

Se prueba así que no existe la tan cacareada politización invocada por el gobierno. Si el presidente García se pronuncia públicamente a favor de la extradición estaría más bien cumpliendo el encargo constitucional de defender los convenios internacionales que el Perú tiene firmados y que condenan los delitos de lesa humanidad.

El ex procurador José Ugaz también ha llamado la atención sobre este silencio cómplice en las más altas esferas peruanas sobre el caso Fujimori: “No quieren contaminar políticamente el caso, lo cual es ilógico porque la extradición es política en sí misma. El Estado Peruano es el reclamante, la víctima de los delitos”.

La propia Bachelet entendió el contenido político que significaba tener a Fujimori en su país cuando, ante el requerimiento del gobierno peruano de entonces, exigió -siendo aún candidata-, que fuera detenido. Hoy, como presidenta, es cierto, se muestra mucho más neutra frente a decisiones del Poder Judicial chileno.

Pero ni el sentido de justicia, ni la defensa de los derechos humanos, es algo que se pierda con el cargo.

¿Cometió un error Chehade al hablar de una mano negra e indisponerse con los jueces supremos de Chile? Según el jurista Jorge Avendaño, hoy en El Comercio, sí. “(…) la primera regla que debe observar un abogado defensor es no pelearse con los jueces que van a resolver su caso”.

Puede ser. Pero se entiende la desesperación del procurador. Los argumentos jurídicos están sobre la mesa. Y conforme se acerca la decisión final de la suprema chilena, siente que los argumentos políticos son los que terminarán pesando en la decisión.



01 septiembre, 2007

Las dos Bolivias


Cada cierto tiempo Bolivia es asaltada por el fantasma de la división. El año 2005 un informe del Consejo Nacional de Inteligencia -oficina encargada de estudios a largo plazo de la CIA- reveló que el país altiplánico incubaba movimientos escisionistas poderosos cuya lucha podía terminar desgajándolo en dos. La semana que pasó, el alcalde de Santa Cruz, Percy Fernández, volvió a proponer esta vieja tesis de dividir a Bolivia, en medio de un paro en apoyo al pedido de Sucre de trasladar los poderes del Estado, reunidos en La Paz: “la única forma de poder convivir bien en el país es hacer dos naciones: una oriental o de los llanos, con Santa Cruz, Pando, Beni, parte de Cochabamba y Chuquisaca, y la otra con la occidental. Hacer dos naciones, una del oriente y la otra del occidente”.

En lo que va del año, Bolivia ha sido remecida por 156 conflictos sociales, unos 26 al mes, según datos de la Fundación Unir. El paro de esta semana –que afectó las regiones de Santa Cruz, Beni, Pando, Tarija, Sucre y Cochabamba - ocasionó pérdidas por alrededor de 20 millones de dólares. Por momentos las protestas fueron tan extendidas y radicales que lograron paralizar el sector productivo del país.

Los más importantes conflictos sociales de los últimos años que de alguna manera han configurado el escenario actual de lucha política en Bolivia aluden connotaciones belicistas: la "guerra del agua" el 2000, la "guerra del gas" el 2003 y la amenaza de "guerra civil" si no ganaba Evo Morales el 2006. Si a ello le agregamos el componente étnico social que tienen estas pugnas, con masas indígenas pobres, por un lado, y concentración de la riqueza en pequeños sectores aristocráticos, por el otro, el riesgo de un fraccionamiento futuro existe.

Bolivia se divide entre un oriente próspero y un occidente pobre representados políticamente hoy en día por Jorge Quiroga (PODEMOS) y Evo Morales (MAS), respectivamente. Pero una cosa es evidenciar esta realidad económica y política y otra muy distinta es expresarla en una división física del país como propone el alcalde cruceño. Partir en dos Bolivia sería condenarla al fracaso como Estado republicano, y dar la razón al informe de la CIA norteamericana que proyectó a zonas de la Región Andina -no necesariamente países- dentro de la categoría de "Estados fallidos", es decir, lugares donde se producirá el colapso del gobierno y sus instituciones democráticas representativas.

El gobierno de Evo Morales ha acusado al gobierno de Washington de alentar estos movimientos -más golpistas que separatistas, en realidad-, y ha anunciado que se investigará el destino de los fondos que a través del USAID entrega los Estados Unidos como cooperación internacional –unos 120 millones de dólares anuales-, y que, se especula, una parte de ellos sirve para financiar a los partidos opositores al MAS.

El portavoz adjunto del Departamento de Estado norteamericano, Tom Casey, ha desmentido esta versión: "No son ciertas para nada las alegaciones de que Estados Unidos está utilizando sus fondos de ayuda para influir en el proceso político o minar de cualquier manera al Gobierno (de Bolivia)". Este martes, el vicepresidente boliviano, Alvaro García, viajará a Estados Unidos para expresar a las autoridades norteamericanas los alcances del uso de los fondos de USAID.

Además de la calle, el espacio en el que Bolivia dirime sus diferencias es la Asamblea Constituyente. Pero aquí también ocurre otra tragedia. Después de once meses de instalada, hasta ahora esta asamblea no puede aprobar un solo artículo de la nueva Constitución. Si las cosas siguen así podrían desatarse nuevas tormentas que amenacen la ya frágil estabilidad democrática del gobierno del presidente Morales.