08 noviembre, 2008

La noche del cambio... desde casita


La noche del triunfo de Obama la viví junto a mis hijos, en casa, sentados en el mueble y pegados al televisor. Fue una noche vibrante para todos, viendo, en vivo y en directo, un pedazo de historia contemporánea.

Seguimos la transmisión de la elección de Obama con el dedo en el control remoto: CNN en español, CNN en inglés, BBC News, Antena tres de España, El Canal Vasco, y Canal 47 de Chile.

Nos quedamos con CNN en inglés: información ágil, variada y analítica, con reporteros en diversas partes de Estados Unidos y del mundo. Pero lo que más nos sorprendió fue la pantalla plasma tactil gigante en la que los datos se presentaban con un toque pluma de la mano.

Una escenografía didáctica y atractiva a la vista. Los chicos aprendieron rapidísimo el sistema de elección indirecta de los Estados Unidos.

Se sorprendieron cuando se enteraron que el voto en Estados es libre y que no hay multa si decides no votar.

Una de mis hijas descubrió que no había negros en el mitin de Mc Cain. Pero que en cambio, había negros, blancos e hispanos en el mitin de Obama.

“Esta bien que haya ganado Obama, porque su mensaje ha logrado captar a todos, sin distinciones”, me dijo la menor de mis hijas.

Escuchamos a Mc Cain aceptar su derrota y felicitar al nuevo presidente electo. “Así funciona la democracia; terminada la campaña, se da vuelta a la página y se piensa en el país”, les dije.

Luego, escuchamos a Obama. Lucía sereno, pero intenso. Su discurso inclusivo y esperanzador enfervorizaba a sus seguidores en el Grand Park de Chicago.

Por primera vez en la historia Estados Unidos había elige para presidente a un hombre negro, decían casi al unísono los comentaristas. Pero antes que eso, Estados Unidos había elegido a un hombre inteligente, carismático y sereno para asumir la dirección del país.

Era casi la una de la madrugada y al día siguiente había colegio. Pero, qué mporta, pensaba. Aquella noche mis hijos habían aprendido algo que les quedará para toda la vida.

No hay comentarios.: