Las dos líneas de pensamiento ayudan a
encontrar un postura. Es un método usado en el análisis científico: tesis,
antítesis, síntesis.
En la lógica lo encontramos en el postulado:
Si A + B Entonces C. Se decanta por inferencia.
En política las dos líneas también ayudan a
condición que se debatan y resuelvan internamente.
Sobre todo si hablamos de un mismo grupo que
la practica como fórmula para diferenciarse de otro.
Esto no está sucediendo ahora ni en el
gobierno, ni en la oposición mayoritaria.
Ambos se vienen manejando por la exhibición
pública de las dos líneas.
Una línea del gobierno, presidida por el
premier Fernando Zavala, seguido por Marisol Pérez Tello, y el de Transporte,
Bruno Giuffra, entiende que ha llegado el momento de ponerle un tatequieto a
Fuerza Popular.
Otro sector del propio gobierno, donde están
los ministros de Defensa, Jorge Nieto y de Producción, Pedro Olaechea, entiende que no es el momento para medir fuerzas y que
lo que conviene es tender puentes al fujimorismo.
Fuerza Popular, por su parte, se debate
también entre su ala dura, rupturista-desestabilizadora, y el ala kenjista cada
vez más notoria en el juego público discrepante con su hermana.
La definición de estas dos líneas
dobles implica la resolución en dos escenarios principales:
1.
Las dos líneas duras se encuentran y resuelven por la vía de la
confrontación. Dependerá de quién gane la opinión pública para saber quién
inclina la balanza.
2.
Las dos líneas suaves se encuentran y resuelven por la vía del
consenso. El gobierno se mantiene a cambio de ceder poder.
Pero también hay escenarios
alternativos:
1.
La línea dura de Gobierno se encuentra con la línea suave de la
oposición y se resuelve por la vía de la imposición. Se fortalece el gobierno.
2.
La línea dura de la oposición se impone a la línea suave del
gobierno. Adiós gobierno.
Por esta razón, el tema de las dos líneas es
mejor resolverlo dentro de casa. No es juego para ventilarse públicamente.
Discrepancia, juego de posiciones,
confrontación; adentro. Hacia afuera, lo más conveniente es una sola posición.
Y una estrategia para obtener el resultado esperado.
El juego de las dos líneas no es siempre paralelo en
política. El peso de los actores termina acercando los vectores hasta tocarse.
Es mejor dos líneas de bandos diferentes que
se confrontan y definen, que cuatro que se superponen y estorban.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario