01 febrero, 2008

La orquesta de la Muerte

Al llegar las camionetas a la puerta del callejón salió un niño. Vio que un grupo de hombres bajaba raudo portando un saco pesado que bajaron de sus vehículos.

-¿Quiénes son ustedes?-, preguntó el niño acercándose a ayudarlos.

- Somos los de la orquesta- dijo uno de ellos.

El niño intentó cargar el saco, pero no pudo. Los “instrumentos” pesaban demasiado.

Los “músicos” ingresaron a la fiesta y un hombre preguntó desde el balcón

-Qué pasa, jefe?

Un disparo seco fue la respuesta que recibió, con lo que empezó la danza de la muerte. Era el Destacamento Colina en acción y su jefe, Martín Rivas, había empezado a ejecutar la partitura macabra que acabó con 15 personas, incluido el niño.

Pasajes sórdidos como éste han sido narrados en el juicio a Fujimori por los crímenes de La Cantuta y Barrios Altos.

De manera truculenta pero sin dramatismo, los agentes-colina van revelando detalles de sus operativos, cuya misión –conocemos ahora- no era capturar sospechosos, sino eliminarlos. Era la forma cómo desde el Estado se decidió responder la estrategia senderista de provocar a los representantes del orden emboscando, torturando o aniquilando, autoridades políticas, militares, policías, dirigentes partidarios o campesinos que se resistían a seguirlos.

Habrá quienes pese a lo que vienen viendo y escuchando justificarán el accionar de este grupo de soldados frente al horror perpetrado por Sendero Luminoso. Su razonamiento los lleva a señalar cosas simples como “no había otra forma”, “si eran terroristas está bien que se los haya eliminado”, hasta formas más elaboradas como “el Estado tiene que defenderse”, “Lo hicieron para preservar la democracia”.

El juicio televisado nos revela hasta dónde llega un Estado cuando se desvía y corrompe producto del control absoluto del poder. El Destacamento Colina, integrante del Ejército Peruano, actuó al amparo del gobierno de turno y aplicó métodos vedados de guerra de baja intensidad.

Bajo la fachada de crear un organismo especializado de inteligencia para luchar contra la subversión, se dio vida a una maquinaria encargada de realizar asesinatos extrajudiciales contra senderistas o sospechosos de senderistas. Por los testimonios escuchados, hubo momentos en que este grupo operó como un sicariato.

De los testimonios ofrecidos hasta ahora resulta imposible que los altos mandos del Ejecutivo –incluido el Jefe del Estado- hubieran desconocido su existencia. Y si verdaderamente el presidente de la República estuvo ajeno a su accionar, es culpable de negligencia punible, cuando menos.

Pero todo indica que no fue así. Como dice el informe de la Comisión de la Verdad “No sólo se impidió deliberadamente la investigación del crimen mediante una imposición de mecanismos legislativos y judiciales, encubriendo y obstaculizando la sanción de los responsables. Como consecuencia de ello, se protegió una política de violación de los derechos humanos al inobservar el Estado obligaciones internacionales, sancionándose, para ese propósito, leyes cuyo único objeto era la impunidad”.

Todo esto lo podemos ver ahora en vivo y en directo por el canal de cable. Una pregunta que cruza todos los testimonios es: ¿puede el Estado en nombre de la seguridad nacional cometer un crimen contra quien a mano armada subvierte el orden con terror? Hubo entre Los colina quienes creyeron que sí. Y me temo que no sólo entre los colina...



4 comentarios:

phyton dijo...

MIRA:
LOS PERUANOS "YA"ESTAMOS BIEN GRANDECITOS PARA QUE NOS CUENTA UN HISTORIA "ACOMODADA",ME COMPRENDES?
LOS PERUANOS "TAMBIEN" PODEMOS PENSAR!
Y TU NO NOS "VAS" A DECIR "LO" QUE TENEMOS QUE PENSAR,VESTIR,COMER!
Y TAMPOCO DEFINIRNOS "COMO" FUJIMORISTAS?...SOLO PORQUE PENSAMOS DIFERENTE!

SARCASMO!

LA HISTORIA ES COMO UNA MONEDA:
TIENE DOS CARAS!

NOS HAZ VISTO LA CARA DE IDIOTAS?

PRENSA EN DECADENCIA!
PROSTITUCION DE LA INFORMACION!
LA PRENSA "DUERME" SIEMPRE CON EL GOBIERNO DE TURNO!

Anónimo dijo...

Mira Canal N idiota.
No se trata de ser fujimorista o no. Se trata de aprobar o no la creación de un comando de la muerte.

Anónimo dijo...

jajajaja...

Anónimo dijo...

Ese tal Phyton del primer comentario. Espero que hayas pensado lo mismo cuando Montesinos y sus secuaces (Bresani...) sacaban esos títulares comprados en la prensa de los 90´s...porque ahi sí que te decían qué pensar o más bien, a quién odiar. Si alguien manipuló tu opinión fue Fujimori y todo lo que permitió en sus narices. ¿O creías a pie juntillas lo que decían La Chuchi, Referéndum, El Mañanero, incluso La Repúdica?. Si eras algo inteligente, cosa que dudo, supongo que no te comías el cuento. Nadie te dice qué o cómo pienses, tan sólo piensa. Pero por lo visto no lo haces, como todo autoritarista te limitas a insultar y gritar.