El presidente Ollanta Humala recibió
en Palacio a 20 de los 24 presidentes de los gobiernos regionales quienes le
expresaron el respaldo a su gobierno y a la democracia. Los llevó el presidente
del Congreso, Daniel Abugattas, apenas tres
días después que Gregorio Santos, representante regional de Cajamarca, públicamente
llamara a “sacar” al primer mandatario de sus funciones.
Ha sido una buena reacción del
presidente del Congreso, pero, mejor, el cambio de opinión del Presidente de la República.
Pocos días atrás, Alejandro Toledo le proponía a Humala, como salida a la
crisis por conflictos sociales, restituir el Consejo Nacional de Descentralización
(CND), una instancia de coordinación y espacio de diálogo entre el gobierno
nacional y los gobiernos subnacionales creado por el gobierno de Toledo.
En esa oportunidad, el presidente
Humala rechazó de plano la idea y se mostró desconfiado de institucionalizar el
diálogo de manera permanente. “Eso sería como tener un sindicato de presidentes
regionales que presentan su pliego de reclamos para negociar en bloque; no Alejandro,
de ninguna manera”, dijo el Presidente Humala.
Evidentemente era un error de visión. Crear
canales de diálogo y concertación es la característica de la democracia. Lo ha
demostrado la reunión de presidentes regionales. “Las elecciones terminan
cuando se cuenta el último voto, de ahí para adelante debemos trabajar en
equipo (...) No podemos perder más tiempo en confrontaciones”, señaló el
coordinador de la Asamblea General de Gobiernos Regionales (ANGR), César
Villanueva.
La ANGR es una sociedad civil
creada para impulsar el proceso de descentralización y representar a los gobiernos
regionales ante el gobierno nacional. No es una instancia impulsada desde el
Estado; ésta era el CND, donde existían representantes de los tres niveles de
gobierno y que actuaba como mecanismo de distención ante los conflictos
sociales, pero, más importante aún, era el rol de acompañamiento y fortalecimiento
del proceso de descentralización.
En las últimas semanas, desde el
gobierno, sólo se ha escuchado críticas a este proceso. Desde cambiarles la
denominación de presidentes regionales a gobernadores, su poca capacidad de
gasto, la baja calidad de los servicios públicos a su cargo, hasta la
posibilidad de abrir proceso al más rebelde de todos, el presidente regional de
Cajamarca.
Tener una instancia de diálogo permanente,
que sea parte de la estructura del Estado para escuchar a los niveles
subnacionales de gobiernos en la instancia nacional no es formar un sindicato o
una federación de protestantes. Es incorporar una práctica democrática al proceso
de toma de decisiones. Es desarrollar un mecanismo de interrelación que puede
servir para cosas como las que hicieron esta semana los presidentes del Congreso
y de la República: reunirse, conversar, proponer, debatir, acordar. En suma, hacer política.
Las reformas políticas y
administrativas que requiere el Estado, la
reforma del canon y su redistribución a nivel nacional, incluyendo aquellas
regiones que no tienen recursos naturales, bien pueden ser discutidas en una
instancia de este tipo desarrollando estrategias
de coordinación y colaboración efectiva donde puedan debatirse políticas y
estrategias que acerquen y construyan en lugar de confrontar como hasta el
momento parece ser la lógica de uno y otro lado.
¿Ya ve presidente Humala? Sentarse en una mesa a conversar no es malo. Y hacerlo de manera permanente, mejor aún. Desde esta perspectiva, aquí tiene usted una idea que puede incluir en su mensaje de 28 de julio: restituya el CND y, si teme que alguien le recuerde que este mecanismo fue creado en el gobierno de Alejandro Toledo, no se preocupe; cámbiele de nombre. Lo importante es que el Estado recupere sus mecanismos de interlocución y representación para, de manera civilizada, asumir los problemas del país y arribar a soluciones razonadas y consensuadas.
¿Ya ve presidente Humala? Sentarse en una mesa a conversar no es malo. Y hacerlo de manera permanente, mejor aún. Desde esta perspectiva, aquí tiene usted una idea que puede incluir en su mensaje de 28 de julio: restituya el CND y, si teme que alguien le recuerde que este mecanismo fue creado en el gobierno de Alejandro Toledo, no se preocupe; cámbiele de nombre. Lo importante es que el Estado recupere sus mecanismos de interlocución y representación para, de manera civilizada, asumir los problemas del país y arribar a soluciones razonadas y consensuadas.
1 comentario:
Esperamos los peruanos que el Presidente Humala tome la decisión de reestablecer el dialogo permanente como todo país civilizado, respetando la representatividad de las diferentes autoridades regionales y locales que fueron elegidas, Sr. Presidente, es necesario, concertar, consultar, conversar, coordinar,etc., es parte del sistema democratico y de las buenas practicas politicas,no solo para prevenir y solucionar los conflictos sociales si no para lograr el desarrollo de nuestro país con verdadera inclusión social. Esther.
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